30 Oct ¿Necesitas relajarte? Aquí te decimos cómo lograrlo
En nuestro actual ritmo de vida existen dos palabras bastante conocidas: relajación y estrés. Todos queremos relajarnos, y evitar el estrés, pero ¿cómo hacerlo?
Es bien sabido que la respiración puede servir como un reductor del estrés, y seguramente muchos han intentado respirar en algún momento particularmente estresante, sin mucho éxito. ¿Por qué pasa esto?
La primera causa se debe a que, probablemente, no estemos aplicando la técnica correcta de respiración, pero no se preocupen, en un momento más la veremos.
La segunda causa tiene que ver con las imágenes mentales que seguimos manteniendo a la hora de ponernos a respirar para ‘calmarnos’. Ambas cosas son muy importantes. Así que cada vez que comencemos a respirar con el objetivo de tranquilizarnos, al mismo tiempo, debemos modificar las imágenes que hay en nuestra pantalla mental.
La respiración correcta es la que realizamos a través de la nariz. Y al respirar, debemos conducir el oxígeno directamente hacia el fondo de nuestros pulmones (recuerden que esa zona es a la que le cabe más aire). Esta acción hará que conforme sigamos respirando, el oxígeno llene paulatinamente la zona media de los pulmones y por último la superior.
Esto nos asegurará que realmente utilicemos toda nuestra capacidad pulmonar, lo que nos permitirá relajarnos de mejor manera. El aire debe vaciarse por la nariz, procurando que primero salga el que se encuentra en el fondo de los pulmones (lo primero que entra es lo primero que sale).
Con esta acción liberaremos a nuestros pulmones de los posibles residuos de gas indeseado, al tiempo que masajeamos los órganos internos alrededor de éstos.
Las imágenes mentales son muy importantes a la hora de querer modificar nuestro estado de ánimo. Si respiramos bien, pero mantenemos en la mente las mismas ideas que nos provocaron el enojo, difícilmente lograremos relajarnos.
Lo que hay que hacer es buscar un lugar donde poder hacer tres o cuatro respiraciones sin interrupciones y, al hacerlas, cambiar las imágenes que hay en nuestra mente. Un buen ejercicio es recordar aquellos lugares donde hemos estado y nos hemos sentido de maravilla.
Si mientras hacemos el ejercicio de respiración, somos capaces de imaginar ese lugar especial, o que el lugar donde te encuentras no hay nadie capaz de hacerte daño, te será más fácil relajarte y ese estado de relajación te durará más tiempo.
Abrazos. ¿Necesitas ayuda? ¡Contáctame!
Fernando Atmamurti.
Soy Coach de bala
nce emocional, meditador y escritor. Me gusta la buena compañía y caminar descalzo en el bosque
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De estudios: negocios internacionales, marketing internacional y recientemente contenidos digitales. Políglota, urbana, museofílica y gourmet. Soy fan del mundo, las culturas y las tendencias. Diseño y asesoro en viajes, mis especialidades: Perú, Francia y Europa.